1960. Movimiento Chicano. derechos civiles.
50 millones de personas hablan español en EEUU. Mensajes políticos, lazos con otros grupos.
Contacto entre las dos lenguas. Carteles, letreros murales, grafitis. Llega a la lengua, con fuerte carga de denuncia. Transformación: de drama como falta de identidad, como orfandad, se pasa a la nueva identidad. Conciencia y reivindicación de la propia historia. De la oralidad se pasa a la escritura. Una lengua se toma como tal a partir de que tiene literatura.
Da voz a una cultura mixta. Pasa a ser un elemento enriquecedor de una identidad plural y mestiza, el concepto moderno de lo que significa ser americano en el siglo XXI. Identidad laberíntica, compleja, multiforme. Intersección entre el “yo soy” y el “I am”. Transformación de ambas lenguas y culturas en un nuevo sentido de identidad. No es un fenómeno anómalo, sino el resultado natural de situaciones de contacto lingüístico. Se ha consolidado socialmente y ha acabado por asumir valores simbólicos.
El lenguaje como estrategia verbal, una marca de identidad para los latinos, que subrayan la importancia de su herencia cultural y que al mismo tiempo reconocen que “Gringlolandia, after all, is our ambivalet, schizophrenic hogar” (Stavans).
Paralelismo con el jazz, con la música: espontaneidad, creatividad y dinamismo.
Nuevas perspectivas sobre temas de identidad cultural, los modelos inflexibles de inclusión o exclusión están siendo reemplazados paulatinamente por nuevas formas trasnacionales híbridas.
Las escritoras. Mujer nueva. Fusión de culturas, liberación de la carga de prejuicios sociales. Lucha contra la opresión, los miedos culturales y las limitaciones del entorno.